Al son del Tiple y la Guabina se educa a los hijos de esta tierra, que a pesar de tener fuerte lucha contra el olvido, siempre se han mantenido firmes en recordar y trasmitir la bella armonía de las cuerdas del tiple y el vistoso y colorido baile tradicional de la Guabina. Sus habitantes le recuerdan a los turistas que en este municipio se toca y se baile al son de la alegría desde hace más de cuatro siglos, cuando los indígenas Chipataes y agataes cantaban estribillos acompañados de flautas de caña e instrumentos de percusión creados por ellos con utensilios naturales como la quijada de algunos animales. Con la llegada de los españoles, el ritmo de los nativos se mezcló con los instrumentos de cuerda, que ayudaron a cultivar y a enaltecer lo que hoy se conoce como el folclor veleño y ello contribuyó a la creación del Festival Nacional del Tiple y la Guabina, que lleva más de sesenta años fortaleciendo la cultura y la tradición colombiana.
El Festival Nacional del Tiple y la Guabina nace en el año de 1940 y actualmente es considerado patrimonio nacional, por conservar los valores musicales y autóctonos de la región andina. Este festival es apoyado anualmente por el Programa Nacional de Concertación Cultural, del Ministerio de Cultura. Recibe cada año aproximadamente a más de 4000 visitantes, que se admiran de la belleza de los trajes coloridos y típicos que utilizan sus habitantes para el desfile inaugural el 2 de agosto.